No hay duda de que Esalen fue en el siglo XX un sitio clave para la idea de fusionar Oriente y Occidente, espiritualidad y conocimiento. Es ahí adonde los recuerdos se dirigen buscando información de cómo hemos llegado a un presente en el que la meditación es un campo de investigación científica, por dar solo un ejemplo.
Y sabiendo que muchos desconocen cómo comenzó ese proyecto llamado Esalen Institute –incluso su existencia–, pues vamos a decir “había una vez…”.
Dos amigos, graduados como psicólogos en la Universidad de Stanford, Michael Murphy y Dick Price, resolvieron crear en 1962 el Instituto Esalen. La decisión la tomaron luego de una beca del Ashram Sri Aurobindo en San Francisco, California. Una propiedad de la familia Murphy ubicada en Big Sur, con el océano Pacífico como espectacular fondo de un imponente escenario natural, fue el lugar elegido.
Big Sur es un sitio donde las mariposas monarca invernan y se halla a unos 72 km. al sur de Monterrey y Carmel.
Dicho espacio se ubica en 10.9 hectáreas de costa, en lo que alguna vez fue el hogar de los esselen, tribu nativa norteamericana. Una característica geológica del enclave son sus aguas termales. Los terrenos están fraccionados por el cañón Hot Springs, que además abastece de agua fresca, junto a las fuentes subterráneas hidrotermales.
Desde el primer momento, Murphy y Price buscaron unir las revelaciones espirituales de Oriente con las revoluciones científicas de Occidente, que por entonces no se veían claramente muy cercanas unas de otras. Oficialmente, fue la conexión entre la evolución humana, el potencial humano y el crecimiento espiritual. O, también, un trabajo exploratorio en humanidades y ciencias que suscitara la plena realización de lo que Aldous Huxley denominó Movimiento del Potencial Humano.
Figuras del conocimiento, la espiritualidad, el arte y la cultura
Estamos hablando de comienzos de los años 60 del siglo pasado. Como centro de formación educativa alternativa, de inspiración humanista, y dedicado a estudios interdisciplinarios, rápidamente se convirtió en un punto de atracción para figuras de diversas ramas del conocimiento, la espiritualidad, el arte y la cultura.
Para citar algunas, psicólogos como Fritz Perls (el padre de la Gestalt), Virginia Satir, Alan Watts (que dirigió el primer seminario en 1962), el citado Aldous Huxley, Abraham Maslow, el físico teórico Richard Feynman, Henry Miller, Arnold J. Toynbee, B.F. Skinner, Stanislav Grof, Moshé Feldenkrais, Carl Rogers, el premio nobel Linus Pauling, Rollo May, Joseph Campbell, Ray Bradbury, Gregory Bateson, Carlos Castaneda, Claudio Naranjo, Fritjof Capra y Deepak Chopra.
Tocaron grupos y artistas como Creedence Clearwater Revival, Bob Dylan, Joan Báez, George Harrison y Ringo Starr, Ravi Shankar, Simon y Garfunkel.
Price estuvo al frente de Esalen hasta su fallecimiento, en 1985, como consecuencia de un accidente de excursionismo. Murphy, a los 92 años, es presidente emérito de la junta directiva.
Humanidades no verbales y reconexión de almas
El instituto experimentó con “las humanidades no verbales“: la educación del cuerpo, los sentidos, las emociones, según las ideas de Huxley.
La intención de esta nueva iniciativa era sugerir el desarrollo de una conciencia del darse cuenta (“awareness”), del fluir presente de la experiencia, para expresarlo plenamente y con precisión, y conseguir una retroalimentación.
Los talleres vivenciales que tuvieron las experiencias iniciales lograron una gran afluencia de asistentes y marcaron el futuro del instituto. Es así que Esalen fue reconocido como institución sin fines de lucro en 1967.
Con el boom de las empresas tecnológicas que se establecieron en Sillicon Valley, sus ejecutivos vieron en Esalen un sitio donde “reconectar con sus almas”, según confesaron algunos, abrumados tanto por el exceso de trabajo como, incluso, de éxito. Un exgerente de Google y ex coach ejecutivo de start ups,Ben Tauber, afirmó en declaraciones al New York Times: “Ellos, en su interior, están dolidos. No pueden dormir de noche. Se preguntan si están haciendo lo correcto para la humanidad y esa incógnita solo se puede responder puertas adentro”.
Hoy en día, en Esalen –uno de los primeros lugares de Estados Unidos donde se impartió yoga y se ofreció comida orgánica– se realizan más de 500 talleres y seminarios públicos al año, así como disertaciones, programas de trabajo-estudio, iniciativas de investigación y programas de internado. Además, posee cómodas cabañas donde se pueden alojar hasta 120 huéspedes.
Precisamente, quienes allí se albergan temporalmente pueden disfrutar de baños termales con vistas al Pacífico.
Más información en https://www.esalen.org/
