Mar Tarazona Beltrán
Odontóloga
El ácido alfa lipoico es un antioxidante muy potente que se encuentra de forma natural en el organismo y en algunos alimentos. Se encuentra en gran cantidad en el riñón, corazón e hígado de bovinos, en espinacas, brócoli y extracto de levadura. Tiene un efecto neuroprotector muy importante y refuerza la acción de otros antioxidantes como las vitaminas C y E. Nos ayuda a mejorar los síntomas del síndrome de la boca ardiente.
El gel de aloe vera nos puede ayudar en los casos de boca seca, además del síndrome de boca ardiente. Si tienes una planta de aloe vera en casa, corta una hoja grande y fresca y “la baba” que sale la aplicas en la zona que notes las molestias o el quemazón. El problema es que el sabor es muy amargo.
El aceite de lavanda tiene propiedades antisépticas que producen un efecto curativo de la sensación de ardor o quemazón de las mucosas bucales. Se aplican unas gotas en una gasa y la colocas en la zona a tratar.
Ozonoterapia. Existen pastas dentales ozonizadas para la limpieza diaria y aceites vegetales ozonizados, sin sustancias nocivas, con un alto poder cicatrizante y regenerativo. Se pueden utilizar en labios agrietados, herpes, quelitis angular, boca ardiente, heridas, infecciones y cualquier problema en las encías, que como sabemos en la menopausia son más frecuentes.
Aparte de la acción cicatrizante y regeneradora, tienen acción bactericida y fungicida sin afectar el esmalte de los dientes y ayudan en la recuperación de las mucosas y encías. También tienen acción antiinflamatoria y analgésica.
El uso de ozono en tratamientos dentales es cada vez más común por todas las ventajas que conlleva y con efectos adversos mínimos.
Los enjuagues con infusión de caléndula están indicados para el tratamiento de la estomatitis aftosa, candidiasis, gingivitis agudas, tratamientos periodontales, heridas post-extracción o de origen mecánico por el uso de prótesis removibles. La caléndula favorece la regeneración de los tejidos, el alivio de los síntomas y un menor tiempo de curación o cicatrización.
El llantén es muy efectivo como desinflamatorio de las encías. Lo podemos usar como pomada realizando un masaje circular por toda la encía después de una buena higiene, o como infusión para enjuagues bucales que ayudarán a la recuperación de los tejidos tras cualquier proceso infeccioso.
El aceite con esencia de mirra y salvia para masajear las encías. Como aceite base podemos utilizar el aceite de sésamo, al que le agregamos aceite esencial de mirra y de salvia. Realizaremos masajes circulares sobre las encías con la punta de los dedos luego del cepillado de los dientes. Es antiséptico, desinflamatorio y deja una sensación agradable y refrescante en la boca.
Para frenar las lesiones cariosas incipientes en los cuellos de los dientes podemos utilizar la tintura de propóleos. Se moja una torunda de algodón y se coloca sobre la lesión cariosa durante varias sesiones. También son muy eficaces los toques con tintura de propóleos diluida en agua para el tratamiento de las aftas.
Otra infusión para beber muy recomendable es la que lleva cola de caballo, ortiga y diente de león para tonificar el hígado, la piel y el proceso digestivo. También fortalece el esmalte dental y los tejidos de las encías. El diente de león aporta minerales a los dientes, la cola de caballo es rica en sílice y las ortigas son ricas en calcio y hierro.
Enjuague con aceite de magnesio. El cloruro de magnesio ayuda a curar y fortalecer dientes y tejidos. Una solución de cloruro de magnesio líquido natural es un enjuague bucal excelente para revitalizar la ecología oral. Utilízalo con toda su potencia o dilúyelo al 50% para usarlo como enjuague bucal una vez al día o a la semana, dependiendo de tu salud bucal.
Oil pulling es una vieja técnica ayurvédica utilizada para tratar el sangrado de encías, blanquear los dientes y refrescar el mal aliento. Puedes usar aceite orgánico de coco, sésamo o de oliva virgen, añade una gota de aceite esencial de orégano y otra gota de cualquier aceite esencial que quieras. En ayunas enjuágate enérgicamente con esta mezcla durante 10-15 minutos y escupe. El aceite elimina las toxinas de dientes y encías.
Colutorios con tintura madre. Las más usadas en odontología son las de caléndula, echinacea, phitolacca y plántago major (llantén). Para los problemas periodontales y la gingivitis sería indicado el colutorio con las tinturas madre de echinacea, caléndula y plántago. Para el síndrome de boca ardiente las de caléndula y echinacea.
La homeopatía siempre nos puede ayudar ante cualquier problema odontológico que surja en la menopausia. Existen medicamentos homeopáticos específicos para cuando padeces de osteoporosis generalizada y enfermedad periodontal, para cuando tienes predisposición a padecer caries o cuando quieres estimular la producción de dentina. También para la xerostomía, el síndrome de la boca ardiente, la gingivitis y periodontitis que son, como ya hemos dicho, unos de los efectos más frecuentes de la menopausia en la boca.
Todas las mujeres, más tarde o más temprano, vamos a vivir esta etapa y tenemos que hacerlo con pensamientos positivos. El estrés, la ansiedad y depresión intensifican y agravan los síntomas de la menopausia. Apoyémonos en nuestros seres queridos y compartamos con ellos nuestros sentimientos y emociones, e intercambiemos experiencias con amigas y familiares que ya hayan pasado por lo mismo.
Gracias a todos los avances de hoy en día, las mujeres podemos tener una boca sana hasta la ancianidad. ¡Cuidémonos!