Desplegando el mapa de las maravillas

"Ser más conscientes de las maravillas que nos rodean es un bien en sí mismo y nos ayuda a construir o mantener la fuerza y la resiliencia que vamos a necesitar". Es lo que afirma Caspar Henderson, escritor y periodista, en un diálogo en que ciencia y naturaleza son el eje central de una realidad sorprendente

Aurelio Álvarez Cortez

¿Qué nos puede maravillar en estos tiempos de incertidumbre y resiliencia? Desde el punto de un divulgador científico como Caspar Henderson, mucho más de lo que podemos creer. En “El mapa de las maravillas” -acaba de publicarse en castellano por Ático de los Libros- este escritor y periodista explora a través del tiempo y las culturas una naturaleza deslumbrante y asombrosa, junto con los hallazgos de la ciencia, en diversos ámbitos.

Henderson ha colaborado con el Financial Times, el Independent, New Scientist y el New York Review of Books. Fue editor senior de OpenDemocracy.com, en 2009 recibió el premio Roger Deakin del Gremio de Autores de Reino Unido y en 2010 el premio Jerwood de la Real Sociedad de Literatura de Gran Bretaña. Además fue nominado al galardón Winton al mejor libro de divulgación cientíca, otorgado por la Real Sociedad de Londres para el Avance de la Ciencia Natural. Actualmente reside en Oxford (Inglaterra).

Con él dialogamos sobre el asombro, la curiosidad, el corazón y el cerebro, la percepción y la conciencia, también de las las nuevas tecnologías… y de las ancestrales. Dijo acerca del aporte que pueden hacer los pueblos indígenas en cuanto a sanar las heridas infligidas al mundo: “Debemos prestar más atención a la sabiduría, venga de donde venga”.

-El hecho de sentirnos maravillados puede impartir sentido, ser la base de una vida buena y plena. Es lo que afirma al comienzo de su libro. En tiempos de incertidumbre, como los actuales, parece una utopía.

-En realidad, no estoy sugiriendo que un sentido de asombro puede resolver los problemas de uno, pero sí creo que ser más conscientes de las maravillas que nos rodean es un bien en sí mismo, y nos ayuda a construir o mantener la fuerza y la resiliencia que vamos a necesitar.

-¿Quizá en el origen de la filosofía hubo alguien que se asombró, que se maravilló por la vida?

- Anuncio -

-Tanto Aristóteles como Platón escribieron que la filosofía comienza en el asombro. Pero una sensación de asombro seguramente los precede a ellos desde hace mucho tiempo. En el libro sugiero que puede ser anterior a los humanos modernos.

-¿La curiosidad es la mano que nos conduce a lo maravilloso?

-Curiosidad y asombro no son lo mismo. Hay curiosidad mórbida, por ejemplo. Pero sí, un vivo sentido de la curiosidad casi seguramente nos llevará a encontrar muchas más maravillas.

-¿Tenemos realmente la capacidad de desentrañar un universo que, según algunos pensadores, parece escrito en algún tipo de código que puede descifrarse pieza a pieza?

-La física y la cosmología ofrecen una explicación coherente, poderosa y sutil de aspectos del universo. Otros campos del esfuerzo científico también hacen grandes contribuciones. Al hacerlo, nos permiten predecir muchas cosas. Pero entender algo mejor no significa que lo apreciemos. De hecho, ciertamente sucede lo contrario.

Henderson explora a través del tiempo y las culturas una naturaleza deslumbrante y asombrosa.

-Hasta la forma de vida más simple es tremendamente compleja. ¿Esto es posible sin que intervenga algún factor externo en su organización?

-No se sabe exactamente cómo evolucionó la vida, pero todas las teorías principales sugieren que la vida puede surgir de procesos ya complejos en el sistema de la Tierra. En otras palabras, el “factor externo” es la Tierra (u otro planeta) donde evoluciona la vida. La vida y el sistema de la Tierra no están separados.

-¿Qué le parece una teoría que afirma que la creación es fractal por naturaleza, que “genera infinitos caminos de creación que llamamos universos”?

-¿Se refiere a la interpretación de “muchos mundos” de la mecánica cuántica propuesta por Hugh Everett? No soy un experto en esta área, pero estoy de acuerdo con el escritor científico Philip Ball, quien sugiere que, si bien esto hace que la ciencia ficción sea buena, no es la versión más plausible de la teoría cuántica.

-El latido cardíaco es único en cada ser humano. ¿Es otra huella dactilar, por decirlo de alguna forma?

-El corazón de cada individuo tiene un patrón distintivo. Sin embargo, esto no se puede ver tan fácilmente como una huella digital; necesita el tipo correcto de máquina para asignar y generar una representación que pueda leer este patrón.

El Paso del Fuego y Fiestas de las Móndidas, también conocidas como Fiestas de San Juan, es una celebración en honor a San Juan Bautista y la Virgen de la Peña que tiene lugar anualmente en la villa española de San Pedro Manrique.

-¿Existe la llamada coherencia cardíaca, entre corazón y cerebro, que demuestra sincronía vibratoria, coherencia y armonía, y que va más allá de un ser humano para extenderse colectivamente?

-El corazón humano y el cerebro funcionan juntos estrechamente, junto con otros órganos del cuerpo. Cuando se trata de la conexión entre las personas, menciono una notable demostración de esto a partir de investigaciones realizadas en España. Cada año, los pobladores de San Pedro Manrique participan en un festival de fuego donde caminan descalzos a través de siete metros de brasas al rojo vivo. En 2010, los investigadores monitorearon las frecuencias cardíacas de estas personas, así como las de sus amigos y familiares que estaban presentes y observando. Descubrieron que estos últimos siguieron un patrón casi idéntico a quienes caminaban por las brasas durante todo el evento, aumentando y cayendo en sincronía.

-No percibimos los objetos como son sino según somos nosotros. ¿Una correcta observación o un mito moderno?

-Es una simplificación, pero apunta a una verdad fundamental. La percepción implica la atención a los datos del mundo real, pero el cerebro interpreta estos datos sobre la base de lo que ya sabe y puede predecir. En este sentido, somos como vemos.

-¿Comparte lo dicho por el psicólogo R. Manzotti: “Tenemos la impresión de que la consciencia está en nuestra cabeza, pero nada de lo que hemos encontrado en el cerebro lo sostiene”?

-Creo que una cabeza, un cerebro, es esencial para la conciencia, pero no suficiente. Manzotti pone bien un punto clave: “La mente es como un arcoíris. El arcoíris está fuera de nuestro cuerpo, pero es un pedazo de nuestra mente”.

-¿El cerebro nos crea primero el mundo, antes de verlo?

-Sí, el cerebro puede ser visto como una “máquina” de predicción (aunque eso no es lo único que es). Como dice el neurocientífico Anil Seth, la conciencia puede ser vista como una “alucinación controlada”. Es una representación del mundo, no el mundo.

“Sería de valor preguntarnos qué queremos significar, exactamente, por pensar”, afirma Henderson.

-¿Pensamos con todo el cuerpo, no solo con el cerebro?

-Nuestros cerebros no podrían existir y no podríamos pensar sin nuestros cuerpos. En mi opinión, sobrevalorar a la mente humana es, y siempre será, una ilusión. Eso no quiere decir que no haya convincentes simulacros, o máquinas pensantes. ¿Pero no sería de valor preguntarnos qué queremos significar, exactamente, por pensar?

-¿Sobreestimamos nuestra conciencia?

-¿Recuerdas la alegoría de Platón del carro tirado por dos caballos? En esta historia, un caballo representa un impulso racional o moral, mientras que el otro representa las pasiones y apetitos irracionales del alma. El desafío para el auriga (cochero) es evitar que estos dos caballos vayan en diferentes direcciones y vuelquen el carro. 

-¿Nos gusta más “la oscuridad”? ¿Nos afectan más las emociones negativas que las positivas?

-El “sesgo de negatividad”, la tendencia a predecir y temer el peor resultado, parece ser un factor persistente en la psicología humana. Puede ser algo bueno hasta cierto punto, ayudándonos a prestar atención y ser cautelosos.  Pero tenemos que ser conscientes de que puede inducirnos a error.
En su libro Factfulness: Ten Reasons We’re Wrong About the World—And Why Things Are Better Than You Think” (Factfulness: Diez razones por las que estamos equivocados sobre el mundo. Y por qué las cosas están mejor de lo que piensas), Hans Rosling muestra cómo tendemos a subestimar constantemente por un amplio margen cuánto han mejorado las cosas para gran parte de la humanidad durante el último siglo. ¡Esto no quiere decir que no sucedan cosas malas!

-Placer, deseos y hábitos: ¿una trilogía para el desencanto?

-No tiene por qué serlo. En contra de eso, pondría a William Blake: “la energía es el deleite eterno”.

-¿La risa anima a la interacción y la cooperación? ¿Deberíamos reírnos más?

-Es una de las cosas que podemos hacer. Debemos reír, bailar y cantar tanto como podamos. El escritor musical Ted Gioia compartió recientemente algunos consejos sobre cómo animarse: Primero, susurra “beep boop” para ti mismo, repite hasta que no estés triste. Luego tapa tu nariz, di “sneep snop”, di “doopdedoop” con una voz realmente profunda. Y después di “bubbles” (burbujas) con la voz más enojada que puedas.

Un peligro cercano: “las redes sociales funcionan como vampiros de enfoque de nuestra atención”, dice Henderson.

-¿Las nuevas tecnologías, con la realidad virtual y otros avances, nos pueden atrapar en una matrix, con lo bueno y lo malo que ello implica?

-El peligro está ahí, las redes sociales funcionan como vampiros de enfoque de nuestra atención, en vez de hacerlo, como en las películas de The Matrix, en la energía de nuestros cuerpos.

-¿Seguimos intentando conquistar el espacio exterior o volcamos el esfuerzo que ello conlleva hacia la recuperación de nuestro planeta?

-En las décadas de 1960 y 1970, muchas personas creían que los humanos viajarían al espacio de forma rutinaria en unas pocas décadas. ¡Habría gente viviendo en la Luna para 2020! Ahora entendemos que la mayoría de las empresas en el espacio pueden hacerlo mucho mejor con naves no tripuladas. Como el Perseverance en Marte, de la NASA. 
Cuando se trata de la recuperación en este planeta, la reducción de los riesgos de un cambio climático peligroso, la adaptación y restauración ecológica, no se trata de lo uno o de lo otro, sino más bien de poner las cosas en perspectiva. Podemos continuar explorando el espacio, mientras asignamos muchos más recursos para reducir el daño en la Tierra.

-¿Deberíamos prestar más atención, y darles cabida, a los pueblos indígenas en este desafío que se nos presenta, de sanar las heridas infligidas al mundo?

-Debemos prestar más atención a la sabiduría, venga de donde venga.

-¿Qué nos puede aportar más elementos para acceder a infinitas posibilidades, como diría un físico cuántico, para ser más resilientes, generadores e inteligentes?

-Las posibilidades pueden no ser infinitas, pero son muy grandes en número. No tengo una buena respuesta, pero creo que una parte importante de ella se relaciona con la educación. Necesitamos tener un diálogo más grande y generoso sobre la naturaleza y el propósito de la educación en nuestras sociedades.

-¿Podemos quedarnos finalmente con la idea suya de que en esta época en que el miedo y el odio dominan la vida pública, la práctica de la maravilla (askesis) jamás ha sido más importante?

-Askesis (del griego, ἄσκησις) a veces se traduce, al inglés al menos, como la práctica de la autodisciplina severa, a menudo por razones religiosas, y está relacionada con el ascetismo. Pero lo que tengo en mente es una práctica en nuestra vida cotidiana que es exuberante y llena de alegría. Esto podría ser yoga. ¡Podría ser fútbol! ¡Podría ser pescar! El punto es dar a la práctica toda la atención y el entusiasmo.
Por supuesto que esto no permite, por sí solo, resolver los desafíos que mencionas, pero nos da resiliencia, fuerza y motivación para cambiar las cosas. Es en este sentido que creo que la maravilla es una emoción política.

Traducción: V.S.L.T.



Lo más destacado

Stanislav Kondratiev
de Unsplash