Pau Hernández
Lejos de los mitos y aspectos fantasiosos que se pueden recoger en textos y relatos sobre estas experiencias, esta capacidad natural en el ser humano ofrece la posibilidad de acceder a espacios alternativos de manifestación (planos paralelos) en los que se puede acceder a un tipo de conocimiento y experiencia del Ser, que muestra, sin lugar a dudas, parte del potencial humano que normalmente queda relegado y olvidado por la atención exclusiva que se le presta al plano físico y a su vehículo asociado (cuerpo físico).
Cuerpo es posible mediante la activación de un cuerpo sutil al que se conoce como “cuerpo energético”, inherente a todo ser humano, que en vibración es similar a la frecuencia de los planos a los que este cuerpo puede acceder, de la misma forma que el cuerpo físico posee una vibración parecida a su plano asociado: el plano físico. Estos planos son tan completos y complejos como lo es el plano físico, con tantas posibilidades de acción como ofrece el plano físico, sin embargo sumidos en leyes que trascienden a la comprensión racional de éstos, como puede ser la atemporalidad, por poner uno de tantos ejemplos que podemos encontrar.
Uno de los motivos por los cuales es tan anhelado el logro de generar las Experiencias Fuera del Cuerpo de forma consciente y con control es porque, a través del acceso a estos planos de manifestación, se puede obtener información propia, contrastable y precisa de la misma persona que accede a la experiencia.
Técnica
Uno de los grandes objetivos que han tenido estudios serios sobre estas experiencias es encontrar la fórmula, la técnica para generarlas y controlarlas. Si se ha leído acerca de éstas, es posible encontrar decenas de técnicas que se ofrecen para generar la experiencia. Ante esto, sería necesario entender que, si es una técnica lo que genera la Experiencia Fuera del Cuerpo, entonces, aplicada por cualquier persona, la experiencia acontecería. Sin embargo, esto no es así. Esto nos aboca a la conclusión inequívoca que no es la técnica lo que genera el acceso a la experiencia, sino que debe haber otras variables que permitan el acceso a estos planos de experimentación. Para aclarar este punto, vamos a analizar el siguiente ejemplo: el cuerpo físico, en términos generales, está funcional en el plano físico porque sus órganos internos, su sistema nervioso, su sistema respiratorio, etcétera, están funcionales y eso es lo que le otorga operatividad. Si sus órganos internos o alguno de sus sistemas internos no funcionasen correctamente, este cuerpo físico no podría estar funcional y operativo en el plano físico.
Es importante entender que este “cuerpo energético”, capaz de acceder a las Experiencias Fuera del Cuerpo, también posee su propia anatomía y que, de la misma forma que el cuerpo físico, también posee “órganos internos” sutiles y sistemas de canales que, si están operativos, permiten que este cuerpo energético sea competente para actuar en los planos en los que es afín. Es decir, si el “cuerpo energético” está funcional, de forma natural accederá a las Experiencias Fuera del Cuerpo porque son su medio, el lugar donde actúa de forma natural, de la misma forma que el cuerpo físico de forma natural opera en el plano físico porque es su medio natural.
¿Todo el mundo puede generar las experiencias fuera del cuerpo?
Sin lugar a dudas, la respuesta es “sí”. En realidad, no hay que generar la experiencia, sino activar el “cuerpo energético”. Una vez activo, el acceso a las Experiencias Fuera del Cuerpo acontece de forma natural, puesto que es parte de la naturaleza humana y que todo ser humano posee este “cuerpo energético”; lo natural es que se acceda a los planos de manifestación donde éste es afín. Es importante reflexionar y pensar que los planos donde este “cuerpo energético” puede acceder, están ahí de forma permanente, de la misma manera que el “cuerpo energético” forma parte de la estructura natural del ser humano. Lo único que hay que hacer para acceder con plena conciencia y control hacia las Experiencias Fuera del Cuerpo es reactivar este cuerpo sutil que permite el acceso a esos planos de manifestación.
El acceso a las Experiencias Fuera del Cuerpo es una vía de conocimiento inherente a toda persona. Activarlas y que pasen a formar parte del día a día requiere de la activación del “cuerpo energético”, cuerpo sutil que forma parte también de todo ser humano.
Estas experiencias y el acceso a la información personal a través del “cuerpo energético” están al alcance de la mano, lo mismo que lo está este artículo, respecto al cuerpo físico. tm