Jigme Rinpoche
Todos queremos salir del sufrimiento y ser felices, pero no encontramos la manera. Deseamos evolucionar y para ello podemos aplicar las enseñanzas de Buda que nos proporciona instrucciones para nuestra vida diaria.
Esta aplicación de la enseñanza en lo cotidiano se consigue a través de cuatro reflexiones breves pero contundentes que pueden acompañarnos en todo momento del día, sobre el cojín de meditación o ¡mientras lavamos los platos!
1) El individuo.
El Buda explica que los seres humanos estamos dotados de una mente. ¿Qué abarca el término mente? En nuestra vida diaria entendemos nuestra mente desde una fuerte identificación con un nombre y un yo.
Buda explica que nuestra mente también es conciencia o dicho de otra forma, lo que nos permite percibir y conocer. En esta conciencia, además, todos estamos dotados de la naturaleza de Buda y podemos aspirar a realizarla y llegar así a liberarnos del sufrimiento.
2) La mente.
Hay una faceta de la mente que llamamos “namshe”, o conciencia ordinaria, y se refiere a “la capacidad de percibir y conocer todo”. Es un proceso que implica un funcionamiento conceptual y emocional.
Hay otra faceta de la mente que llamamos “yeshe” y es el aspecto de la mente realizada que está más allá del funcionamiento dualista.
La mente no tiene forma ni sustancia, pero es capaz de tener claridad, presencia y percepción, es decir, conocimiento.
3) La identificación con un yo.
Nuestra conciencia ordinaria nos conduce a un apego egocéntrico. “Todos los problemas” provienen de ese apego llamado “apego egocéntrico”. Nuestra “identificación” con ese yo es el origen de todos nuestros problemas.
La solución para remediarlo es la meditación, que nos permite saber quienes somos realmente y desmontar el aferramiento a un yo que no es justificable. De esta forma, podremos liberarnos del sufrimiento. Este es el sentido del nirvana, ir más allá del sufrimiento.
4) El Karma.
Sabemos que toda causa crea un efecto. Tenemos tendencias fuertemente instaladas que nos van a hacer evolucionar en una dirección nefasta. Caminar hacia la perfección es difícil. Siendo seres humanos nos vemos a veces obligados a actuar de forma negativa, incluso aunque no queramos. Pero hay métodos para frenar esa negatividad. Gracias a la comprensión del proceso kármico vamos a generar el deseo de no cometer actos nocivos y aplicar los antídotos propuestos en el budismo. El resultado será que obtendremos un potencial benéfico y podremos continuar progresando.
El lama Jigme Rinpoche estará en Valencia del 29 de abril al 1 de mayo. Ofrecerá una conferencia pública con entrada libre el viernes 29, a las 19 hs., en el Ayre Hotel Astoria Palace, e impartirá un curso de meditación el 30 de abril y 1 de mayo, en Bodhi Salud, en Chiva (Valencia). Información e inscripciones: teléfono 639 208 551, info@bodhipath.es
